14 personas se enfrentan a juicio por agresión a guardias civiles en una detención viral en Granada.
El Juzgado de lo Penal número 5 de Granada ha anunciado el inicio del juicio oral contra 14 procesados por su supuesta participación en las agresiones sufridas por unos guardias civiles durante la detención de un delincuente en Pinos Puente. El joven detenido, considerado como el delincuente más buscado de la provincia, se enfrenta a ocho años de prisión por varios delitos. El incidente fue ampliamente difundido en las redes sociales.
El Instituto Armado logró la detención del individuo, que estaba reclamado por 14 juzgados, como parte de la operación Kyrios. Se le acusa de varios tiroteos con tentativa de homicidio y de participar en el tráfico de marihuana. Además de los delitos anteriores, el detenido también es uno de los procesados por supuestas agresiones a los guardias civiles. Se espera un refuerzo del dispositivo de seguridad para el juicio que se llevará a cabo en el edificio judicial de Caleta.
La operación para capturar a este joven comenzó después de un tiroteo ocurrido en Albolote en febrero de 2020. La peligrosidad del detenido radica en su supuesta posesión de armas de fuego y su disposición a disparar. Además, no contaba con un domicilio fijo y recibía apoyo de su entorno familiar y amigos en Pinos Puente, quienes dificultaban su detención y ayudaban en su huida.
La detención tuvo lugar cuando agentes de paisano observaron al joven llegar en un automóvil a un domicilio en Pinos Puente. Intentaron detenerlo, pero él se resistió dando mordiscos y patadas, y pidiendo ayuda. Una multitud supuestamente rodeó a los agentes y los agredió en un intento de arrancar al detenido de sus manos. Incluso lograron hacerlo en dos ocasiones, pero finalmente los guardias civiles pudieron detenerlo definitivamente, a pesar de los golpes recibidos.
Se necesitó un dispositivo de más de 20 agentes para contener a las más de 60 personas que intentaron evitar la detención. Durante el incidente, seis agentes resultaron heridos por mordeduras y golpes, y los vehículos oficiales fueron dañados por una lluvia de piedras al abandonar la zona con el detenido. La Guardia Civil inició una investigación para identificar a todos los agresores y dañinos de vehículos oficiales.
Según las conclusiones provisionales de la Fiscalía, el detenido habría incitado a los demás acusados a acorralar y atacar a los agentes de forma concertada y coordinada para impedir su detención. Por estos delitos, se le acusa de dos delitos de atentado en concurso con otro de lesiones, otros dos de lesiones leves y resistencia a los agentes de la autoridad. Su hermana también se enfrenta a penas de prisión por su presunta participación en los delitos mencionados.