Granada, 23 de diciembre. La tragedia ha sacudido a la comunidad granadina tras la muerte de un bebé de apenas once meses, quien fue víctima de un devastador incendio que se desató en un edificio de la zona Norte de la ciudad. El pequeño fue trasladado de urgencia a un centro hospitalario para recibir atención médica, pero lamentablemente no logró sobrevivir a las graves lesiones que sufría.

El siniestro comenzó en el salón de una vivienda ubicada en la sexta planta del inmueble, aunque todavía se están investigando las causas que provocaron las llamas. Según ha informado Gustavo Molina, jefe del Cuerpo de Bomberos de Granada, se realizó un trabajo heroico durante el incidente, logrando rescatar a un total de ocho personas, tanto en la planta del fuego como en la superior.

El incendio tuvo lugar en la calle Henríquez de Jorquera y las primeras alarmas se activaron alrededor de las 11:45 horas. Al menos cinco de las personas rescatadas presentaron síntomas de inhalación de humo debido a la intensidad del fuego. En un acto de valentía, otros cuatro ocupantes del edificio se refugiaron en una habitación cercana hasta que los bomberos lograron controlar la situación y pudieron evacuarlos con seguridad.

Las circunstancias trágicas que rodean el fallecimiento del menor han llevado a que agentes de la Policía Nacional, especialmente del Grupo de Homicidios de Granada, inicien una investigación sobre el incidente. Se sospecha que el bebé era uno de los habitantes de la vivienda donde se originó el fuego. Sin embargo, al momento de la llegada de las autoridades, ya había sido trasladado a un hospital.

En el lugar de los hechos, además de las fuerzas policiales, también llegaron unidades de la Policía Local, del Servicio de Bomberos y equipos de Emergencias Sanitarias. Durante el operativo, dos bomberos sufrieron heridas leves por quemaduras, lo que resalta la peligrosidad inherente a su trabajo y la emergencia generada por el incendio.