Un conductor está siendo investigado por la Guardia Civil después de ser captado en un control de velocidad circulando a una velocidad excesiva en Chipiona, Cádiz. El conductor, quien fue detectado a 113 km/h en un tramo de carretera limitado a 60 km/h, decidió darse a la fuga cuando los agentes le pidieron detenerse para notificarle la infracción cometida.
Según ha informado la Guardia Civil, el incidente tuvo lugar durante un servicio de control de velocidad en la carretera A-480. El conductor, al percatarse de las indicaciones de los agentes, disminuyó la velocidad hasta alcanzarlos para luego acelerar de manera brusca, provocando un derrape y poniendo en grave riesgo tanto a los agentes como a los demás usuarios de la vía presentes en ese momento.
Ante esta situación, los agentes decidieron iniciar una persecución del vehículo, el cual fue abandonado por su único ocupante, quien huyó a pie.
Debido a estos actos, el Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico del Subsector de Cádiz ha procedido a investigar al conductor por un presunto delito contra la seguridad vial tipificado en el artículo 380 del código penal, por conducción temeraria. Dicho delito puede ser castigado con una pena de prisión que oscila entre seis meses y dos años, además de la privación del derecho a conducir vehículos motorizados y ciclomotores por un periodo de tiempo que puede superar el año y alcanzar hasta seis años.