SEVILLA, 26 de octubre. Cientos de ciudadanos se congregaron el pasado domingo a partir del mediodía frente al Palacio de San Telmo, sede del Gobierno andaluz, para reivindicar un mensaje claro: “Nuestra vida no puede esperar”. Este evento fue convocado por asociaciones contra el cáncer de mama de toda Andalucía, incluyendo a Amama Sevilla, que expone graves irregularidades en el programa de detección precoz, revelando esperas de más de un año para pruebas diagnósticas esenciales.

Ángela Claverol, presidenta de Amama Sevilla, compartió su indignación con los medios, afirmando que “la supervivencia política no puede colocarse por encima de la vida de las personas”. En un emotivo relato, destacó el impacto de estos errores en la vida de las mujeres, recordando a Anabel, quien tras una larga espera se sometió a una mastectomía el 15 de octubre, dejando claro que “no es justo. Lo he perdido todo”. Su testimonio resuena con el de muchas otras que exigen respuestas frente a un sistema que ha fallado en proporcionar la atención adecuada.

La concentración, bajo el lema "Nuestra vida no puede esperar", hizo un llamado a todos los que valoran la sanidad pública a unirse a la causa. Las asociaciones hicieron hincapié en que la respuesta no se limita a unos pocos miles; en realidad, representa a muchas más mujeres que se sienten afectadas. Insistieron en que es imperativo que la Junta de Andalucía asuma su responsabilidad y amplíe los recursos destinados a la salud pública, tanto en medios materiales como humanos.

Las organizadoras subrayaron que “el tiempo de declaraciones vacías ha terminado”. Las mujeres han puesto su confianza en un sistema que no solo les ha fallado, sino que ha comprometido su salud. La protesta se produce en un contexto en el que el Ejecutivo de Juanma Moreno ha anunciado medidas para asegurar que estas situaciones no se repitan. Con la dimisión de la consejera de Salud, Rocío Hernández, y la incorporación de Antonio Sanz, quien ahora suma Sanidad a sus competencias, se ha propuesto un ambicioso plan de acción por un total de 12 millones de euros y 119 nuevos profesionales destinados a mejorar el cribado del cáncer de mama, así como otro plan integral que abordará otros tipos de cáncer.

Antonio Sanz, consejero de Sanidad, Presidencia y Emergencias, informó sobre la identificación de 2.317 mujeres con hallazgos radiológicos catalogados como BI-RADS 3, de las cuales el 90% pertenecen al Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla. Lo alarmante es que la mayoría ha superado el tiempo recomendado para el seguimiento de estos hallazgos y han padecido prolongadas demoras en la atención.

Hasta el 21 de octubre, se confirmó que 1.778 de esas mujeres han logrado realizarse la prueba indicada, aunque no se les había informado adecuadamente sobre su situación ni de forma oportuna. Las demás mujeres en esta circunstancia han sido citadas antes del 30 de noviembre para recibir la atención necesaria.

La Junta ha comenzado a revisar y actualizar el proceso asistencial de cáncer de mama que ha estado vigente desde 2011, con el objetivo de alinearlo con los avances más recientes en ciencia y tecnología. Además, se planea incorporar inteligencia artificial de manera gradual al programa de cribado, una tecnología que ya ha mostrado resultados prometedores en ensayos previos y que se espera mejore tanto la precisión en los diagnósticos como la efectividad del sistema de salud en general.