En Cádiz, la justicia ha decidido mantener en prisión a los seis acusados por la muerte de dos agentes de la Guardia Civil, quienes perdieron la vida tras ser embestidos por una narcolancha en el puerto de Barbate el mes pasado. Los recursos presentados pidiendo libertad provisional han sido desestimados por la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Cádiz, confirmando la medida de prisión preventiva dictada previamente.
La Audiencia ha argumentado que, dado que a los acusados se les imputan delitos graves con penas importantes, existe un alto riesgo de fuga si se les permite salir en libertad provisional. En el caso del supuesto piloto de la narcolancha, se destaca que su labor era llevar lanchas al mar en el Estrecho, facilitando su posible huida a Marruecos u otro país norteafricano, lo que lo convierte en un riesgo de fuga.
El acusado sostiene que la lancha que tripulaban no fue la que chocó con la de los agentes, basándose en el número de motores y antenas. Sin embargo, la Audiencia considera que hay indicios claros de que la lancha del acusado fue la que colisionó deliberadamente con la embarcación policial, basándose en pruebas como daños compatibles con la colisión y restos de pintura coincidentes.
El abogado Jorge Piedrafita, representante de la Asociación Defensa Integral Víctimas Especializada, ha expresado su satisfacción con la decisión de la Sala, asegurando que permitirá llevar a los acusados a juicio por unos hechos muy graves y que buscarán la máxima pena posible en este caso.
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