La organización agraria COAG-Jaén ha expresado su preocupación este jueves ante las predicciones sobre la próxima cosecha de aceituna y la producción de aceite de oliva.

Según COAG-Jaén, aunque el olivo goza de buenas condiciones, todavía se espera una producción de más de 300.000 toneladas de aceite de los secanos. Esta cifra es significativa si se compara con las producciones de Grecia e Italia en años de buena cosecha, que alcanzan las 400.000 toneladas.

La falta de lluvia en la cuenca del Guadalquivir es preocupante, ya que apenas ha habido precipitaciones desde abril, con un déficit del 72 por ciento en las lluvias de mayo respecto a la media histórica del mes. Durante los meses de verano, las lluvias han sido prácticamente inexistentes.

La carencia de agua es especialmente crítica en momentos clave para el olivar, como la floración en abril y la maduración en septiembre. Cada día sin lluvia en septiembre podría significar una pérdida de rendimiento de aceite, y si no llueve en octubre, el fruto se momificará y caerá.

En este sentido, los secanos ya muestran signos de sequía, con olivos que presentan aceitunas arrugadas. La situación más preocupante se encuentra en la campiña hasta Porcuna.

COAG-Jaén destaca que aún es temprano para hacer previsiones sobre la cosecha, ya que la cantidad de lluvia en las próximas semanas podría determinar parte de la producción de aproximadamente 180.000 toneladas de aceite en los secanos de la provincia de Jaén, o de las aproximadamente 600.000 toneladas en Andalucía en una cosecha media.

La organización agraria señala que la producción total de aceite de oliva en Grecia e Italia puede llegar a las 400.000 toneladas en una cosecha buena, mientras que en Portugal es de unas 200.000 toneladas.

En cuanto a la disponibilidad de aceite de oliva, COAG-Jaén informa que hasta que comience la recolección de la próxima cosecha, las existencias en el mercado son limitadas, con apenas 188.000 toneladas en julio.