El responsable del sector apícola de COAG Andalucía, Antonio Vázquez, ha urgido a la Junta de Andalucía a que atienda la petición de reunión de esta organización agraria para abordar la problemática que está generando la progresiva expansión de una especie invasora de avispón, la 'Vespa orientalis'. Esta especie está afectando gravemente a la apicultura andaluza, ya que ataca las colmenas en busca de alimento, se lleva las reservas de miel y polen y acaba con la cría.

COAG Andalucía ha remitido una solicitud de reunión a la Dirección General de Política Forestal y Sostenibilidad de la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, manifestando la necesidad de declarar la 'Vespa orientalis' como especie exótica invasora. Desde que apareció en Andalucía en 2019, COAG Andalucía ha estado siguiendo de cerca su expansión y ha realizado las gestiones correspondientes para que sea declarada como tal, algo que compete al Gobierno estatal.

En el comunicado, el responsable sectorial explica que el pasado año mantuvieron reuniones con la Dirección General de Política Forestal y Biodiversidad para plantear la necesidad de establecer un programa de control de esta avispa. En octubre de 2020, se confirmó la presencia de un nido de otra especie exótica invasora, la 'Vespa velutina', en la provincia de Cádiz.

Ante la empeoramiento de la situación y la expansión de este avispón en Andalucía, COAG Andalucía insiste en la urgencia de declarar la 'Vespa orientalis' como especie exótica invasora y exige a la Junta que implemente un plan de control que involucre a los ayuntamientos.

Por ello, solicita una reunión lo antes posible para analizar el 'Programa de gestión de avispones exóticos (Género Vespa) en la Comunidad Autónoma de Andalucía', elaborado por la Consejería de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, y su aplicación en el sector apícola andaluz.

Desde que se detectó por primera vez en la provincia de Cádiz, ha habido un aumento de avistamientos en el sur de la península. Especialmente, se está expandiendo rápidamente por la provincia de Málaga y ya se han encontrado ejemplares en las provincias de Sevilla, Huelva, Córdoba y Jaén.

La ubicación de los nidos, cerca de núcleos urbanos y a ras de suelo, dificulta aún más la situación. Al tocar los nidos, pueden producirse ataques múltiples con riesgo de consecuencias fatales. La picadura de este avispón es muy dolorosa y puede causar reacciones alérgicas.

Además de atacar a las colmenas de abejas y disminuir la producción de miel, esta especie invasora también afecta al avispón autóctono al competir por presas y otros elementos de su alimentación. Asimismo, puede ocasionar importantes pérdidas en el sector agrícola al atacar los frutos y dejarlos sin valor comercial.