ALMERÍA, 6 de octubre.

El rastro digital del teléfono móvil de Antonio Campos, un hombre de 54 años de Berja que fue encontrado sin vida hace una semana en el maletero de su coche en San Agustín, El Ejido, ha sido crucial para que las autoridades lograran identificar y detener a H., un joven de 23 años, como sospechoso del homicidio.

Según han informado fuentes de la investigación a Europa Press, los investigadores de la Unidad Orgánica de la Policía Judicial llevaron a cabo un análisis exhaustivo de la agenda de contactos de Campos y el historial de trayectos registrados por Google Maps, que documentó sus movimientos desde que desapareció la noche del 27 de septiembre, cuando salió de su hogar al volante de su vehículo.

Estos indicios resultaron determinantes para trazar una línea de investigación que permitiera reconstruir los últimos momentos de Antonio Campos. Las imágenes de las cámaras de seguridad, tanto de tráfico como de establecimientos cercanos al lugar donde se halló su Volkswagen Passat blanco, complementaron este análisis y proporcionaron información valiosa a los investigadores.

La causa, que permanece bajo el secreto de sumario en la Sección Civil y de Instrucción del Tribunal de Instancia número 3 de El Ejido, está abierta a la posibilidad de que haya más implicados. Se han llevado a cabo diversas medidas forenses, incluyendo la recolección de huellas dactilares del vehículo, que podrían revelar la participación de otras personas en este trágico suceso.

El presunto autor del crimen fue detenido el 1 de octubre, tan solo tres días después del hallazgo del cadáver, y participó en los registros realizados por orden judicial en su domicilio, donde se recogieron más elementos de prueba. Aunque optó por no declarar ante el juez, se le atribuye haber admitido su implicación en el asesinato de Antonio, quien presentaba claros signos de violencia y estaba maniatado al momento de su descubrimiento.

Desde el pasado viernes, el detenido se encuentra bajo prisión provisional, sin posibilidad de fianza, mientras la investigación avanza para esclarecer todas las responsabilidades y encontrar a otros posibles cómplices en este caso.

El impacto del homicidio ha sido profundamente sentido en la comunidad del Poniente almeriense, dado que la víctima, un reconocido historiador y cofrade, tenía una activa participación en la vida social y cultural de Berja y trabajaba en el área de turismo del Ayuntamiento de El Ejido.

El pasado viernes, un nutrido grupo de personas se congregó ante el Ayuntamiento de Berja para expresar su repulsa por el asesinato de Antonio Campos y ofrecer apoyo a su familia, quienes afirmaron que el detenido, de origen marroquí, no tenía vínculos con ellos. La comunidad ha exigido una investigación exhaustiva que aclare los hechos y que se haga justicia.

Los seres queridos de Antonio todavía no comprenden cómo ocurrió esta tragedia, ya que, según han indicado, el fallecido tenía en su poder varias pertenencias al momento de su muerte, lo que descarta un robo. También señalaron que el fallecimiento fue consecuencia de los golpes en la cabeza que sufrió.