El día 4 de septiembre en Madrid, un problema técnico en los servidores de Adif, la entidad encargada de gestionar la red ferroviaria pública, ha provocado interrupciones y esperas prolongadas en los trenes de alta velocidad que tienen como origen o destino la capital española.

Según ha indicado Adif a través de sus canales oficiales, se está trabajando para restablecer la operación normal de los trenes, empleando sistemas de respaldo mientras se soluciona la situación técnica que ha afectado a su infraestructura informática.

La incidencia ha traído consigo la falta de información actualizada sobre las llegadas y salidas en las dos principales estaciones de Madrid, Atocha y Chamartín, lo que ha complicado la planificación de los viajeros. Esta falta de datos ha generado una notable frustración entre los usuarios del servicio ferroviario.

Las quejas de los pasajeros no se han hecho esperar, ya que muchos de ellos han señalado que los retrasos en sus trayectos superan la hora, generando un impacto significativo en sus planes de viaje y en su rutina diaria.