Un varón ha sido condenado a 13 años y medio de cárcel por abuso sexual continuado y contra la intimidad de su sobrino menor de edad, a quien sometió a prácticas sexuales y grabó en su dormitorio mediante una cámara instalada en un reloj despertador que le regaló.

La Audiencia de Sevilla emitió una sentencia el pasado 30 de mayo, en la que se establece que el acusado mantuvo una relación estable con la pareja sentimental de su sobrina desde 2013 hasta 2017. Durante este período, entabló una relación de familiaridad con el menor, quien vivía en el mismo domicilio que el acusado. Esta relación le permitió interesarse por los aspectos de la vida del menor y aprovecharlo para llevar a cabo los abusos.

Desde el verano de 2014 hasta septiembre de 2017, el acusado buscaba quedarse a solas con el menor en diferentes lugares, donde realizaba tocamientos en la zona genital y lo masturbaba, llegando incluso a realizarle felaciones. Para controlar al menor, le regaló un despertador con una cámara oculta que grababa su intimidad sin que él supiera de su existencia.

Las imágenes grabadas por el reloj despertador fueron encontradas en el ordenador portátil del acusado, mostrando al menor en momentos de su privacidad y al propio acusado realizando tocamientos en sus genitales.

Como resultado de este caso, el tribunal le impuso una condena de once años de cárcel por abuso sexual continuado y dos años y medio adicionales por delito contra la intimidad. Además, se le prohíbe acercarse o comunicarse con el menor durante 12 años, se le impone siete años de vigilancia post penitenciaria, 18 años de inhabilitación para profesiones que involucren contacto con menores, una multa y una indemnización de 40.000 euros a favor de la víctima.