La Junta de Andalucía ha hecho un llamado a la conciencia colectiva en la sociedad para que cada individuo asuma su parte en la prevención de incendios forestales, al mismo tiempo que anunció que presentará una nueva Ley de Montes en el Parlamento durante el próximo mes de septiembre.

La consejera de Sostenibilidad y Medio Ambiente, Catalina García, explicó que esta legislación, que se revisa por primera vez en tres décadas, busca ser un pilar fundamental para la planificación sostenible y a largo plazo de los bosques andaluces.

Durante su intervención en la apertura de la XL Feria de Muestras del Parque Natural de Sierra Mágina en Huelma, la consejera subrayó que Andalucía alberga una masa forestal de aproximadamente 4,3 millones de hectáreas, lo que equivale a la mitad de su territorio total.

García distinguió que un 74 por ciento de esta superficie boscosa es de propiedad privada, mientras que el 26 por ciento pertenece al sector público. En este contexto, enfatizó que la nueva norma está diseñada para abordar las necesidades de todos los actores involucrados, planteando también la importancia de los bosques públicos que deben contribuir a la vitalidad del territorio.

Afirmó que hasta hace poco, el uso sostenible de los recursos forestales en Andalucía era mínimo, con una cifra de aprovechamiento del 0,024 por ciento. Resaltó que los expertos sugieren que cada hectárea puede albergar hasta diez toneladas de biomasa, que si no se gestiona adecuadamente, puede ser un caldo de cultivo para incendios devastadores. La consejera defendió que es crucial adoptar una gestión sostenible que no solo proteja los bosques, sino que también permita el desarrollo del entorno rural.

En relación a lo anterior, planteó que la nueva legislación no solo se centrará en la protección del medio ambiente, sino que también incluirá mecanismos para facilitar el uso de los recursos, mejorar la colaboración entre el sector público y privado, así como directrices para prevenir incendios forestales.

Asimismo, hizo hincapié en la necesidad de una reflexión a nivel nacional que garantice la protección del mundo rural, advirtiendo que si este sector no se sostiene, afectará gravemente a los territorios que han sido cuidados por generaciones.

García subrayó la importancia de que la administración se dedique a gestionar y planificar de manera conjunta con los municipios, vecinos, agricultores y ganaderos que habitan el territorio.

En lo que respecta a la actual ola de incendios que afecta a diversas regiones de España, la consejera mencionó que Andalucía, siendo una de las comunidades más impactadas por las altas temperaturas y el cambio climático, ha manejado entre 15 y 20 conatos de incendio diariamente desde julio.

El éxito radica, según García, en la rápida respuesta de los servicios de emergencias, así como en la coordinación y movilización eficiente de recursos a los puntos críticos, lo que se complementó con factores como la favorable dirección del viento durante algunos incidentes.

La consejera también expresó su reconocimiento a los profesionales del Infoca y la Agencia de Emergencias, destacando que este año se ha destinado el mayor presupuesto de la historia para la gestión del fuego, superando los 256 millones de euros y contando con una plantilla de más de 5.000 efectivos.

Sin embargo, advirtió que la temporada de riesgo no ha terminado y reiteró su llamado a la responsabilidad social, señalando que entre el 80 y el 90 por ciento de los incendios son originados por acciones humanas.

Para concluir, García instó a todos a convertirse en guardianes del entorno, enfatizando que cada acción cuenta y puede tener repercusiones catastróficas. Hizo un esfuerzo por promover un compromiso compartido entre administraciones, la sociedad civil y los sectores agrícolas y empresariales para evitar que estos incidentes se conviertan en tragedias anuales.