MADRID, 7 Nov. - El consejero delegado de Unicaja Banco, Isidro Rubiales, ha destacado el desafío actual de la rentabilidad para su entidad, una vez que ha establecido una base sólida y ha completado la reorganización de su gobierno corporativo.

"Nuestro reto y prioridad es la rentabilidad. Con nuestra integración finalizada (en referencia a la fusión con Liberbank en julio de 2021) y un nuevo modelo de gobierno corporativo, nos enfrentamos al gran desafío de la rentabilidad", afirmó durante el XXX Encuentro Financiero organizado por Deloitte y ABC.

De esta manera, el objetivo actual de Unicaja Banco es dar continuidad a su plan estratégico vigente hasta 2024. "A partir de la mitad de 2024, comenzaremos a reflexionar sobre un nuevo plan", agregó.

Para lograrlo, la entidad se centrará en sus negocios tradicionales, minoristas y corporativos, aprovechando su proximidad al sector empresarial en los territorios en los que opera, al mismo tiempo que busca diversificación a través de la gestión de ahorros.

En relación al impuesto temporal a la banca, que podría extenderse indefinidamente según el acuerdo de gobierno entre el PSOE y Sumar, Rubiales señaló que tiene "dos circunstancias perniciosas" para el sector. Por un lado, se basa en una idea que posiblemente no sea correcta.

"Consideramos que este impuesto surge en una situación extraordinaria, donde pareciera que, debido a circunstancias inesperadas para el sector, se obtienen ingresos extraordinarios y, con un compromiso solidario, es necesario devolver parte de esos ingresos a la sociedad", explicó.

Sin embargo, Rubiales señala que la situación "extraordinaria" ha sido el período de tipos de interés negativos, momento en el que "nadie se preocupó por el sector financiero".

Por otro lado, también mencionó otros efectos negativos, como el impacto en la competencia con entidades europeas o la estigmatización del sector.