SEVILLA, 4 de agosto.

La Guardia Civil ha realizado importantes avances en la lucha contra el narcotráfico con la detención de cinco sospechosos en el marco de la operación conocida como 'Italica Halfway'. Esta operación se centra en desmantelar una red criminal que operaba en Sevilla, con un enfoque marcado en la distribución de drogas tanto a nivel nacional como internacional.

La indagación comenzó a mediados del año pasado, a raíz de indicios sobre la existencia de una organización organizada en Sevilla que se dedicaba a la venta y distribución de sustancias ilegales. Se constató que esta red no solo operaba a nivel nacional, sino que también había realizado transportes de drogas hacia diversos países de la Unión Europea.

En la etapa inicial de la operación, los agentes establecieron un minucioso despliegue de vigilancia sobre unas instalaciones asociadas a una empresa legal de transporte de mercancías con base en Sevilla. Según los informes, esta empresa servía como fachada para ocultar las drogas en vehículos que se desplazaban por diferentes rutas comerciales.

Dadas las sospechas sobre un vehículo específico de la empresa, que aparentemente llevaba consigo una considerable cantidad de estupefacientes, los investigadores seguían su trayecto hacia Francia. Para evitar levantar sospechas, se coordinó con las autoridades francesas para realizar un control discreto en la frontera.

Durante este operativo en territorio francés, el vehículo fue detenido y registrado por la Gendarmería. En su interior se encontraron 15 fardos escondidos entre artículos de uso doméstico, que contenían un total de 652,9 kilos de hachís.

El conductor del vehículo fue detenido y puesto a disposición de la justicia francesa, que ordenó su encarcelamiento. Tras esta detención, el resto de los miembros de la red, temerosos de ser objeto de vigilancia, decidieron parar sus actividades ilegales y retomar su rutina comercial habitual.

A medida que la investigación avanzaba, se descubrió que el líder de la organización tenía reuniones con otros narcotraficantes en diversas localidades de la costa andaluza. Estas citas se llevaban a cabo bajo rigurosas medidas de seguridad, indicando un intento por reactivar la operativa criminal.

Con esta información nueva en mano, la Guardia Civil lanzó la segunda fase de la operación, intensificando su vigilancia sobre los miembros de la red. Se descubrieron planes para llevar a cabo envíos de drogas a Francia e Italia, que no se concretaron debido al miedo de algunos integrantes a ser detectados por las fuerzas de seguridad.

Los agentes llevaron a cabo registros en tres naves industriales vinculadas con la empresa de transporte, que servían como escondites para los envíos ilícitos. Durante estas inspecciones, se confiscó material informático crucial y documentos que están siendo analizados para obtener mayores revelaciones sobre la red criminal.

La operación, ejecutada por el Equipo de Delitos Organizados y Antidroga (EDOA) de la Comandancia de Sevilla, concluyó con la detención de cinco personas: uno en Francia y cuatro más en Sevilla. Esta acción representa un importante golpe contra la estructura del narcotráfico en la región.

Los detenidos han sido presentados ante la autoridad judicial bajo la acusación de pertenencia a organización criminal y tráfico de drogas a nivel internacional. La investigación sigue abierta, y los agentes continúan analizando la información incautada, lo que podría dar lugar a nuevas acciones policiales en el futuro.