MADRID, 24 Abr.

El Ministro de Agricultura y Alimentación, Luis Planas, ha expresado su confianza en la capacidad del Gobierno central para frenar la regularización de los regadíos en el entorno de Doñana que pretende la Junta de Andalucía. Planas ha asegurado que el gobierno cuenta con mecanismos legales para actuar sin necesidad de aplicar el artículo 155 de la Constitución.

En una entrevista en la Cadena Ser, Planas explicó que "hay mecanismos legales, digamos menos extraordinarios que ese mecanismo constitucional". Además, recordó que el Gobierno de España recurrió a este instrumento dos veces; una en relación con el sistema fiscal en Canarias, que finalmente no se materializó, y otra durante el periodo en que Mariano Rajoy era presidente, en relación con la situación de Cataluña. Sin embargo, Planas cree que es prematuro hablar de aplicar un "artículo 155 medioambiental" en Andalucía, ya que según él, "el problema no es donde se llega, sino el propio camino; qué imagen se están creando con toda esta historia”.

El ministro de Agricultura ha destacado que el gobierno dispone de "mecanismos legales" para actuar. Ha explicado que "el tema es una ley que no es conforme al ordenamiento jurídico y aquí la Junta se atribuye competencias en materia de agua que no son suyas; hay un reparto de competencias y los derechos de agua y la regulación de las cuencas, en este caso la del Guadalquivir, es competencia nacional por el propio Tribunal Constitucional que lo declaró así e implica que es el gobierno de España el que tiene que resolver, a través de los planes hidrológicos y de las dotaciones de agua de la confederación hidrográfica”.

Planas también se mostró preocupado por la reputación de la exportación de frutos rojos de Andalucía. Según él, ya se están recibiendo muchas consultas a través de las embajadas, y hay certificadoras privadas a las que las grandes centrales de compra les solicitan que verifiquen los productos. Planas argumentó que España vende al año 1500 millones de euros de frutos rojos básicamente a la Unión Europea, así como a países como Reino Unido y Suiza. Por ello, Planas aseguró que el buen trabajo de los agricultores no debería verse perjudicado por la situación.

En cuanto a la propuesta de la Junta de Andalucía, Planas la considera ilógica, ya que consiste en "hacer una promesa sobre la base de lo que no existe". El "famoso trasvase del Tinto-Odiel" al que apela la Junta de Andalucía para legalizar los regadíos no está pensado para nuevas zonas de cultivo, sino para regenerar los acuíferos que nutren en parte a los cultivos legales de frutos rojos de la zona. Además, Planas acusó al PP de haber comprado el programa de Vox que está defendiendo riegos ilegales.

Para el ministro, "todo esto es muy poco serio de cara a los agricultores y a la opinión pública", y plantea "problemas muy serios de cara a Europa". "Hay a quien esto no le importa, pero a mí sí que me importa y nos debería importar a todos los españoles que sabemos que para nosotros Bruselas es nuestro Washington y que ahí están buena parte de las decisiones que afectan positivamente a España".

Respecto a la sequía, el ministro cree que se puede llegar a tiempo para paliar las consecuencias del cambio climático si "cada uno hace lo que puede hacer" y cree que hay que apoyar el sector primario de una forma clara. Planas cree que no hay campaña electoral en la que no se utilice el tema del agua, pero argumentó que "no se puede repartir el agua que no existe". Según él, existen "alternativas racionales" para paliar la situación de sequía, como el uso de aguas no convencionales, recicladas y la desalación, que es más costosa, pero se ha abaratado debido a la bajada de precios de la energía gracias a las renovables.