El magistrado de la Audiencia Provincial de Sevilla, Luis Gonzaga de Oro-Pulido, se ha convertido en el primer juez de España en incorporar un perro guía a su vida. Desde el pasado mes de febrero, Pusky, un perro labrador de dos años, formado en la Fundación ONCE del Perro Guía, le acompaña en su trabajo en los Juzgados de la capital andaluza, siendo testigo fiel de todos sus movimientos y sentencias.

Luis de Oro-Pulido es afiliado a la ONCE desde 2004 y ha sido usuario de bastón desde 2018. A pesar de los obstáculos en su trayectoria, como la pérdida progresiva de la visión y los choques con bolardos y otras personas en su camino al trabajo, el magistrado ha demostrado una gran fuerza, tesón y constancia. Ahora, con la incorporación de Pusky, de Oro-Pulido espera tener mayor seguridad, tranquilidad y autonomía en su movilidad tanto en el ámbito privado como en el público.

La Fundación ONCE del Perro Guía ha acompañado tanto a de Oro-Pulido como a Pusky durante el proceso de adaptación a su nueva vida juntos. Aunque las primeras semanas son de adaptación, el magistrado ya es consciente de la calidad de vida que Pusky va a aportar a su movilidad y autonomía. Además, en el Palacio de Justicia de Sevilla, Pusky no pasa desapercibido entre togas, abogados, presuntos delincuentes y medios de comunicación habituales que cubren la información judicial.

Desde que se afilió en 2004 por una retinosis que pronto derivaría en una pérdida progresiva de la visión, la ONCE ha desplegado toda su estructura de servicios sociales para responder a las necesidades de Luis de Oro-Pulido. Con el tiempo, otro plan le permitió aprender el uso del bastón y ganar confianza en sus desplazamientos. Ahora, tras cuatro años y medio en la lista de espera de la Fundación ONCE del Perro Guía, de Oro-Pulido y Pusky han congeniado desde el primer momento y se han convertido en un ejemplo de inclusión en el ámbito judicial.