HUELVA, 12 de noviembre. La Dirección General de Pesca, Acuicultura y Economía Azul ha tomado la decisión de cerrar la pesquería de coquina (Donax trunculus) en todas las áreas de producción del golfo de Cádiz. Esta medida se ha implementado para proteger el recurso, que ha disminuido significativamente, y responde a la necesidad de salvaguardar los recientes reclutas identificados en la zona.

De acuerdo con la resolución publicada en el BOJA este miércoles, con fecha del 4 de noviembre, informes científicos elaborados por la Agencia de Gestión Agraria y Pesquera de Andalucía (Agapa) y el Instituto Español de Oceanografía (IEO-CSIC) han indicado que el stock de coquina ha permanecido "por debajo de los umbrales de rendimiento medio de captura" a lo largo del año, lo que afecta la salud de la especie y su sostenibilidad.

Sin embargo, aunque la situación de la pesca es preocupante, los últimos análisis han revelado un incremento notable en la cantidad de reclutas. Esta información refuerza la postura de la Consejería sobre la necesidad de un cierre temporal de la pesquería, no solo por la escasez de coquina, sino también para asegurar la supervivencia de las nuevas poblaciones encontradas.

Por esta razón, la Consejería ha implementado el cierre de la pesquería de coquina en el golfo de Cádiz desde el 10 de noviembre, prohibiendo así la actividad de los mariscadores profesionales autorizados debido a esta "causa de fuerza mayor". Además, se mantiene la prohibición de métodos de pesca a través de rastros remolcados.

Aparte de la prohibición de captura, se establece que la pesca accidental de coquina debe resultar en el retorno inmediato de los ejemplares al mar, así como prohibiciones sobre su mantenimiento, desembarque y comercialización en la región del golfo de Cádiz.

En la resolución, se hace referencia a la Orden del 20 de julio de 2023, la cual establece un Plan de Gestión para la coquina en el golfo, buscando alcanzar "niveles de rendimiento máximo sostenible" en cumplimiento con las normativas de la Unión Europea.

De acuerdo con lo estipulado en el artículo 3.1 de esta orden, se considera que la coquina está dentro de límites biológicos seguros y es sostenible cuando las capturas anuales no superan el Rendimiento Máximo Sostenible y se cumplen ciertos criterios de captura y reclutamiento establecidos.

El artículo 3.2 permite que la Dirección General de Marisqueo modifique anualmente los puntos de referencia biológicos basándose en la evaluación científica disponible.

En caso de que se supere el valor de captura total anual, el artículo 4.1 estipula el cierre de la pesquería por el resto de la campaña en curso, un paso necesario para preservar el recurso a largo plazo.

Por otra parte, el artículo 4.5 establece que el cierre se aplicará automáticamente en áreas de producción donde el rendimiento medio de captura sea igual o inferior a 1,5 kg/mariscador/hora, lo que indica que los niveles de sostenibilidad han sido comprometidos, permitiendo así que las actividades pesqueras se reanuden solo cuando la ciencia garantice que la condición del recurso permita dicha acción.