La Policía Nacional ha llevado a cabo una operación llamada "Drive", en la que ha detenido a 18 personas acusadas de pertenecer a una organización criminal. Los delitos por los que han sido detenidos son tráfico de drogas, tenencia ilícita de armas, amenazas graves, defraudación de fluido eléctrico y pertenencia a organización criminal. La operación ha implicado 16 registros domiciliarios en las provincias de Sevilla y Huelva, y en los barrios de San Jerónimo y Triana en la capital andaluza. La banda estaba dedicada a robar droga a otros narcotraficantes.

Los agentes iniciaron la investigación por los sucesos con armas de fuego protagonizados por los integrantes de la banda. En el desarrollo de la misma, los agentes descubrieron los mecanismos con los que operaba la organización, que en argot se conoce como "vuelcos". Además, la Policía logró frustar distintas ventas de sustancias estupefacientes y detectó indicios de que la organización financiaba actividades con varios cultivos "indoor" de marihuana.

La Policía intervino también en una empresa de compraventa de vehículos que, presuntamente, era empleada para el blanqueo y ocultación de bienes provenientes del delito.

En una primera fase de la operación se llevaron a cabo once entradas y registros, y en una segunda fase, otras cinco entradas y registros que afectaron a los "escalones inferiores" de la organización.

La Policía ha intervenido 120 gramos de cocaína, 260 kilos de marihuana, 15 kilos de hachís, diversas drogas de diseño y sustancia de corte, así como diferentes materiales para el posterior tratamiento de las sustancias intervenidas. También se han desmantelado cinco cultivos de marihuana "indoor" y se intervinieron 1.500 plantas.

Además, se procedió a la intervención de seis armas de fuego aptas para el disparo, 600 cartuchos de munición de distintos calibres, varios cargadores de pistola, tres chalecos antibalas, un dispositivo luminoso policial, dos equipos de transmisiones, un inhibidor de frecuencias y un total de 11 pasamontañas. También se incautaron cerca de 50.000 euros, cuatro vehículos de alta gama, uno de ellos preparado para ocultar mercancía en una caleta, y una motocicleta.