En una reciente operación, la Policía Nacional ha arrestado a tres individuos por su aparente involucramiento en un delito relacionado con el almacenamiento ilegal de combustibles y pertenencia a una organización criminal. La acción se llevó a cabo tras descubrir un depósito clandestino de combustible en una zona urbana de El Puerto de Santa María, Cádiz, donde se hallaron aproximadamente 700 garrafas que contenían un total estimado de 17.500 litros de gasolina.

Los sucesos se originaron el 20 de junio, cuando una patrulla en servicio notó a un hombre manipulando garrafas en un vehículo estacionado en una gasolinera autotservicio. A raíz de esta observación, los investigadores de la policía intensificaron su indagación y localizaron una parcela cercana, donde un segundo vehículo estaba realizando maniobras similares que despertaron las alarmas de los agentes.

Al inspeccionar la finca, los agentes encontraron una gran cantidad de garrafas de 25 litros, muchas de las cuales contenían un líquido que desprendía olor y apariencia de carburante. Debido a la grave posibilidad de incendio o explosión, especialmente considerando las temperaturas extremas del día, que superaban los 35 grados centígrados, se tomó la cautela de evacuar a los residentes cercanos como medida preventiva.

Durante el operativo, también fue descubierto un tercer sospechoso que se había escondido entre la vegetación de la parcela. Ninguno de los detenidos poseía autorización legal para almacenar materiales inflamables ni implementaron medidas de seguridad adecuadas para ello. La operación finalizó con la detención de los tres hombres, el aseguramiento de los vehículos involucrados y el inicio del proceso de custodia del combustible confiscado, que, según las primeras evaluaciones, aparentemente iba destinado a abastecer embarcaciones implicadas en el tráfico de drogas por mar.