En Málaga, el líder del Partido Comunista de Andalucía, Ernesto Alba, ha dado un importante paso al anunciar su candidatura en las primarias de Izquierda Unida (IU) para las próximas elecciones a la Junta de Andalucía. Durante su presentación, hizo un ferviente llamado a la unidad de la izquierda para hacer frente al creciente auge de la extrema derecha en el país.

En su intervención, Alba destacó la necesidad de un debate interno en la izquierda andaluza y propuso llevar un proyecto político integral que genere esperanza tanto en Andalucía como en el resto de España. "Nuestra candidatura surge de una reflexión profunda que hemos ido cultivando dentro de la organización", afirmó, haciendo hincapié en la importancia de conectar con las bases.

Además, valoró positivamente el trabajo realizado por el actual Gobierno de España, al que considera el más progresista en la reciente historia del país. Resaltó logros como el ingreso mínimo vital y la reforma laboral, atribuyendo estos avances a la colaboración y unidad de las fuerzas de izquierda. "Gracias a este esfuerzo, los sectores más vulnerables han podido mejorar su calidad de vida durante años complicados", añadió.

Sin embargo, Alba también señaló una preocupante realidad: el avance de la extrema derecha, que, según sus palabras, está logrando convencer a los sectores más desfavorecidos. "Estamos viendo cómo sus mensajes divisivos calan en los barrios, enfrentando a los que menos tienen", lamentó, subrayando que el odio y la división se están apoderando del discurso público.

El líder comunista criticó el enfoque de la derecha, que presenta al inmigrante como el enemigo a vencer, ignorando los verdaderos problemas que afectan a la sociedad. "Los especuladores son los que están causando el aumento de precios en vivienda y alimentación, convirtiendo Andalucía en una jungla donde solo los fuertes sobreviven", declaró, subrayando la necesidad de un cambio urgente en el enfoque político.

Al reflexionar sobre el estado actual de la izquierda, Alba reconoció que se deben realizar cambios significativos en su enfoque. "Es hora de dejar de mirarnos el ombligo y centrarnos en la gente, en los barrios, en quienes decimos defender", insistió, señalando que la lucha debe ser colectiva y no individual.

El candidato subrayó que el auge de la extrema derecha se alimenta de discursos de odio y selfishness y que es fundamental que la izquierda encuentre nuevas formas de comunicación y conexión con la ciudadanía. "Necesitamos revitalizar nuestros valores de solidaridad y comunidad, que son la base de lo que nos une", afirmó con determinación.

Alba instó a que el debate de la izquierda se lleve a cabo en los espacios donde la gente vive y trabaja. "No podemos enfrentar esta crisis solos como partidos políticos; es imprescindible involucrar a la comunidad", expresó, enfatizando la importancia de construir la lucha desde la base.

Finalmente, el líder de IU hizo un llamado a la movilización colectiva, instando a militantes y ciudadanos a no dejarse llevar por el desánimo. "Debemos demostrar que queremos una Andalucía digna; no solo sobrevivir, sino vivir plenamente", concluyó, comprometiéndose a recorrer cada rincón de la región y a abrir un proceso político que dé voz a la ciudadanía en la lucha por un futuro mejor.