SEVILLA, 30 de diciembre.

A tan solo tres días de que Jaén lleve a cabo su moción de censura, las capitales andaluzas de Sevilla y Cádiz se preparan para el comienzo de 2025 sin haber aprobado aún sus respectivos presupuestos municipales. En contraste, las ciudades de Málaga y Almería fueron las últimas en legitimizar sus cuentas definitivas el 16 y 18 de diciembre, respectivamente.

En este panorama, el Ayuntamiento de Sevilla continúa a la espera de la validación de su presupuesto. El alcalde, José Luis Sanz, había propuesto el 7 de noviembre un plazo de aproximadamente dos meses para llegar a acuerdos que permitan aprobar el nuevo proyecto presupuestario. De no conseguirlo, se verá obligado a recurrir una vez más al mecanismo de cuestión de confianza, el mismo que le permitió pasar el presupuesto de 2024 a pesar de gobernar en minoría y de no tener el respaldo de otros partidos.

Por su parte, Cádiz enfrenta el nuevo año sin un presupuesto municipal aprobado, ya que hasta ahora no se ha presentado el proyecto para 2025. En este contexto, el 28 de junio el Ayuntamiento aprobó el presupuesto de 2024 con el apoyo del PP, la abstención del PSOE y la oposición de Adelante Izquierda Gaditana.

En cuanto a Jaén, el último presupuesto municipal vigente se remonta a 2017, elaborado bajo la administración del PP. El 13 de diciembre, el partido Jaén Merece Más (JM+) rompió su pacto de gobierno con el PP, que había permitido al partido de la gaviota acceder a la Alcaldía tras las elecciones de mayo de 2023. Ahora, se ha aliado con el PSOE para presentar una moción que será debatida el 2 de enero; de aprobarse, significará el fin del mandato del PP en la Alcaldía y el regreso de Julio Millán (PSOE) al cargo.

En respuesta a esta situación, el secretario general del PSOE en Jaén y portavoz en el Ayuntamiento, Julio Millán, ya había criticado el 12 de diciembre al alcalde Agustín González (PP) por prorrogar el presupuesto de 2017 para el ejercicio de 2025. Millán indicó que, hasta esa fecha, no existía ningún borrador conocido ni se había presentado en las comisiones correspondientes; evidenciando que el equipo de gobierno parece resignado a no poder aprobar nuevas cuentas para el próximo año.

La capital de Almería, por su parte, se ha adelantado al aprobar sus presupuestos municipales, gracias a la mayoría absoluta del PP. De este modo, el presupuesto, que entra en vigor el 1 de enero, asciende a un total de 277.698.443,21 euros, consolidándose así como la primera ciudad andaluza en obtener esta aprobación.

El Ayuntamiento de Málaga también ha dado luz verde a su presupuesto para 2025, aprobándolo el 18 de diciembre. Esta vez, el equipo de gobierno del PP obtuvo el apoyo de sus miembros, mientras que los grupos de la oposición —PSOE, Vox y Con Málaga— se manifestaron en contra. El presupuesto para el nuevo año alcanza la cifra de 1.256,8 millones de euros.

En la lista de capitales que han aprobado sus presupuestos, Córdoba se unió a la lista al hacerlo el 25 de noviembre en una Sesión Plenaria Extraordinaria. El grupo del PP logró la aprobación del presupuesto, mientras que la oposición —formada por PSOE, Hacemos y Vox— votó en contra, después de que se rechazaran las enmiendas presentadas por PSOE y Hacemos, con el apoyo de los populares y Vox. El presupuesto consolidado se sitúa en 587,29 millones para ingresos y 586,40 millones para gastos.

Onubense también inicia 2025 con sus cuentas aprobadas tras aprobarse la propuesta en el Pleno del 27 de noviembre. Con algo más de 196,7 millones, y sumando la contabilidad de las empresas municipales, se alcanza un total de 199,9 millones, marcando un hito al ser la primera vez que se ratifican las cuentas antes de finalizar el año en curso.

Granada se suma al grupo de ciudades andaluzas con cuentas municipales aprobadas, materializando su presupuesto en la sesión del 29 de noviembre, con el respaldo del PP y el voto en contra de la oposición, que incluye al PSOE y Vox. Este presupuesto, el primero en 14 años que está listo para su implementación el 1 de enero, constata ingresos de 340,6 millones y gastos de 330,9 millones.

En contraposición, las ocho diputaciones provinciales de Andalucía comenzarán 2025 con sus presupuestos ya aprobados. Las últimas en hacerlo han sido Cádiz y Córdoba, que aprobaron sus cuentas para el próximo ejercicio el día de ayer. En Cádiz, se ha establecido el mayor presupuesto de su historia, con una asignación de 389,4 millones de euros, respaldado por sus socios de gobierno —PP y La Línea 100x100—, además de IU, mientras que el PSOE se opuso. En Córdoba, se aprobó un presupuesto de 431 millones, contando con los votos favorables del PP y las abstenciones de PSOE e IU, y el rechazo de Vox.

Anteriores a esto, la Diputación de Granada ratificó también su presupuesto para 2025 el 23 de diciembre, alcanzando los 418 millones, y apoyando decididamente el desarrollo social y económico de la región.

Por otro lado, la Diputación de Málaga aprobó de manera preliminar sus presupuestos para 2025 el 18 de noviembre, alcanzando la cantidad de 459,68 millones para todo el sector público provincial, con los votos a favor del PP y en contra de la oposición (Con Málaga, Vox y PSOE).

La Diputación de Huelva también dio luz verde a sus presupuestos, los más altos de su historia, el 19 de noviembre, alcanzando los 220 millones; cifra que llega a 238 millones incluyendo a la Agencia Provincial Tributaria y la Agencia Destino Huelva, con un incremento de más del 10% comparado con el año anterior. Este presupuesto obtuvo el respaldo del PP, abstenciones de Vox, y se rechazó con los votos del PSOE y de IU Verdes Equo Podemos Iniciativa.

Finalmente, el 28 de noviembre, la Diputación de Jaén aprobó su presupuesto para el próximo año, superando los 372 millones, lo que representa un crecimiento del 10% en comparación con el presupuesto de 2024, también respaldado por la mayoría absoluta del grupo socialista, con la oposición del PP.

Asimismo, la Diputación de Almería aprobó el 4 de diciembre sus presupuestos para 2025, que alcanzan la cifra histórica de 268.500.000 euros, aunque con el rechazo de PSOE y Vox, resaltando el equipo del PP la naturaleza social e inversora de estas cuentas.