En una sentencia emitida el pasado 20 de abril, la Audiencia de Sevilla absolvió a un hombre acusado de agresión sexual a su hija. Según la declaración de la joven, su padre se introdujo en su cama y mantuvo relaciones sexuales con ella, pero posteriormente se retractó y afirmó que fue de manera voluntaria. Ante esta contradicción, el tribunal aplicó el principio de "in dubio pro reo", ya que no se pudo determinar cuándo estaba mintiendo la joven.

El incidente ocurrió en 2018, cuando el acusado, un hombre de origen ecuatoriano de aproximadamente 54 años, convivía con su hija de 24 años en el mismo domicilio de San Juan de Aznalfarache. Según el relato de la sentencia, el acusado decidió tener relaciones sexuales con su hija mientras esta dormía en la cama contigua a la suya. Aunque se encontraron restos de semen en los genitales y la ropa de la joven, el tribunal consideró que no se pudo probar que los actos hubieran ocurrido sin su consentimiento.

La sentencia destaca la existencia de pruebas de los actos sexuales, pero señala que el único testimonio sobre el consentimiento proviene de la joven, quien inicialmente denunció el caso ante la Policía Nacional pero luego afirmó en el juicio que todo había sido voluntario. Ante esta retractación, el tribunal reconoce que no hay elementos definitivos para determinar cuándo estaba mintiendo la hija del acusado.

Aunque no se encontraron signos físicos de violencia en el cuerpo de la joven que contradigan su testimonio exculpatorio, el tribunal hace hincapié en el estado anímico descrito en el parte sanitario, donde se la describe como "tranquila" durante un hecho de este tipo, lo cual resulta inusual.

Ante la falta de certeza sobre la veracidad de los testimonios, la Audiencia de Sevilla aplicó el principio de "in dubio pro reo" y absolvió al acusado de todos los cargos.