SEVILLA, 31 de octubre. La consejera de Economía, Hacienda, Fondos Europeas y Diálogo Social de Andalucía, Carolina España, ha criticado con dureza las declaraciones realizadas el día de ayer por el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, durante su comparecencia en la comisión de investigación del "caso Koldo" en el Senado, tildando su comportamiento de "hipocresía política" y acusándole de hablar negativamente sobre Andalucía.

En una entrevista para Canal Sur TV, recogida por Europa Press, España afirmó que lo ocurrido fue un claro ejemplo de "hipocresía política" que no se había visto en mucho tiempo, haciendo énfasis en las constantes evasivas del presidente cuando se le cuestionó, con frases como "no me consta" y "no me acuerdo".

La consejera insinuó que el presidente parece haber "perdido la memoria", señalando que en la situación actual es difícil confiar en la credibilidad del Gobierno. España sugirió que, aunque la vicepresidente y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, podría respaldar a su jefe, también tendría que enfrentar las consecuencias de decisiones pasadas que la involucraron, haciendo referencia a su apoyo a Santos Cerdán, quien actualmente se encuentra en prisión.

España consideró que las declaraciones de Sánchez no solo faltaron al respeto al Senado, sino que también fueron perjudiciales para la imagen de Andalucía, sugiriendo que el presidente no debería hablar con desdén sobre la comunidad autónoma y sus habitantes.

Durante su intervención, Sánchez criticó la adjudicación de 242 millones de euros a clínicas privadas por parte de la Junta de Andalucía, liderada por Juanma Moreno (PP-A), a través de contratos de emergencia que se establecieron durante la pandemia de Covid-19. España cuestionó el motivo detrás de las palabras negativas del presidente sobre la gestión andaluza.

La consejera instó a Montero, como representante andaluza, a "pararle los pies" a Sánchez y a defender a su tierra, remarcando la importancia de un liderazgo que respete a los ciudadanos. En su análisis final, España opinó que, a pesar de alguna verdad revelada por Sánchez, como su reconocimiento de haber cobrado dinero en efectivo de sobres de su partido, Andalucía y España merecen un enfoque gubernamental diferente y un líder que valore y respete las instituciones.