ALMERÍA, 21 de noviembre. En un giro significativo en la política local, Ramón Fernández-Pacheco ha tomado las riendas del Partido Popular (PP) de Almería tras la sorpresiva renuncia de Javier Aureliano García, quien lidió con su salida de todos los cargos en medio de un escándalo de corrupción. García decidió centrarse en su defensa ante las nuevas acusaciones que surgen de la segunda fase del caso 'Mascarillas', que investiga supuestas irregularidades en la concesión de contratos y el pago de comisiones en la Diputación de Almería y el Ayuntamiento de Fines.

En una reciente rueda de prensa, el secretario general del PP andaluz, Antonio Repullo, acompañado del nuevo presidente almeriense, Ramón Fernández-Pacheco, expresó confianza en que tanto él como el exvicepresidente Fernando Giménez, también bajo investigación, demostrarán su inocencia. “Este es el momento para que demuestren su integridad”, subrayó Fernández-Pacheco ante los medios, una declaración que busca consolidar la unidad del partido en tiempos turbulentos.

A pesar de los cambios en la cúpula del PP provincial, tanto Repullo como Fernández-Pacheco han optado por no convocar un congreso extraordinario, argumentando la necesidad de mantener cierta continuidad. Sin embargo, reconocieron que Fernández-Pacheco tendrá que implementar algunos "ajustes" estratégicos para enfrentar esta nueva etapa con eficacia y cohesión.

Por otra parte, los líderes del PP anunciaron un periodo de “reflexión” que se abrirá para reorganizar el equipo de la Diputación de Almería y determinar quién tomará el mando de la institución, al menos provisionalmente. En este interinato, el vicepresidente primero, Ángel Escobar, asumirá el cargo de manera temporal mientras se concretan los próximos pasos del partido.