En una decisión polémica, la Comisión Disciplinaria del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ha impuesto una multa de 1.500 euros al magistrado Manuel Piñar, del Juzgado de lo Penal número 1 de Granada, por una infracción grave. Esta acción disciplinaria se deriva de la difusión de datos relacionados con uno de los hijos de Juana Rivas, la madre de Maracena condenada por sustracción de menores.

La resolución detalla que en diciembre de 2021, el magistrado rechazó la solicitud de suspensión de condena presentada por la defensa de Juana Rivas después de recibir un indulto del Gobierno, generando críticas por parte de ciertos sectores. En respuesta a estas críticas, Piñar decidió enviar un comunicado a un periódico nacional para explicar su postura y las razones detrás de su decisión, revelando así información relacionada con el caso.

A pesar de argumentar que los datos ya eran conocidos por el público a través de los medios de comunicación, el CGPJ enfatiza que el magistrado no tenía autorización para divulgar esa información y que su deber de reserva no desaparece por el hecho de que la información ya estuviera en el dominio público.

La Comisión Disciplinaria señala que Piñar estaba al tanto de información confidencial sobre un menor debido a su posición como juez en el caso, y a pesar de esto, decidió compartir esos detalles con un medio de comunicación para justificar su decisión judicial. Esta acción va en contra de las normas de la Ley Orgánica y no se puede amparar en el derecho a la libertad de expresión, como argumentó el magistrado.

En vista de estos hechos, se impone al magistrado una multa de 1.500 euros por infringir el artículo 418.8 de la Ley Orgánica como autor disciplinariamente responsable de una infracción grave. Esta sanción es consecuencia directa de la violación de la reserva y la divulgación de información confidencial sin autorización.