La Policía Nacional ha llevado a cabo dos investigaciones sobre dos organizaciones delictivas creadas por escuelas-club de fútbol de Granada, que engañaban a familiares de menores y jóvenes extranjeros, principalmente brasileños, haciéndoles creer que podrían llegar a ser futbolistas profesionales de élite.

En total, se han detenido a 11 personas y otras dos están siendo investigadas como supuestos miembros de ambas organizaciones, y hay alrededor de 70 familias de jugadores estafadas.

Las investigaciones, denominadas como Operaciones Gol y Alevines, fueron llevadas a cabo por agentes de la Brigada de Extranjería y Fronteras después de recibir una denuncia de un jugador y su entrenador fichados en su país de origen por un club de fútbol ubicado en un pueblo del área metropolitana de Granada para jugar y participar en competiciones deportivas oficiales.

Las familias abonaron los 5.000 euros requeridos por los responsables del club que incluían alojamiento, manutención, desplazamientos, seguro médico privado y matrícula en un centro docente oficial para obtener la residencia legal por estudios en España. Sin embargo, comprobaron que ninguno de los acuerdos se cumplía y los gastos exigidos iban aumentando cada mes.

La Policía descubrió que en ambos clubes había jóvenes de distintos orígenes alojados de manera hacinada en viviendas alquiladas por los clubes deportivos. Además, se apreciaron indicios de relación entre los responsables de ambos clubes y se instaron multitud de expedientes de regularización en la Oficina de Extranjeros de la ciudad que, de manera sistemática, siempre terminaban inadmitidos a trámite o denegados.

Los responsables de las escuelas no cumplían con ninguno de los acuerdos con las familias y les solicitaban mensualmente entre 1.500 y 1.700 euros más. Además, informaban de que los jugadores no podían federarse, algo que demostró ser totalmente falso ya que únicamente se necesita un pasaporte en vigor para participar en competiciones oficiales a nivel provincial o autonómico.

Los entramados delictivos captan jóvenes de entornos económicos acomodados con habilidades como futbolistas para estafar a los jóvenes y sus familias y obtener elevadas cantidades económicas en un corto espacio de tiempo. Las expectativas de ser futbolista profesional se acaban una vez que caducan los visados o periodos de estancia como turistas, o cuando la familia no puede asumir el alto coste económico exigido.

En total, se ha detenido a once personas por su presunta relación con esta trama criminal compuesta por tres eslabones: el primero de ellos formado por los captadores, el segundo por los propietarios de los centros docentes y el tercero y más importante, compuesto por el equipo directivo de los clubes deportivos.