SEVILLA, 27 de noviembre.

En un reciente Debate sobre el Estado de la Comunidad, Manuel Gavira, representante del Grupo Parlamentario Vox en Andalucía, no escatimó en criticar al presidente de la Junta, Juanma Moreno. Gavira aludió a la situación actual de la comunidad autónoma, afirmando que la herencia que deja la gestión del presidente es "una Andalucía que no queremos".

Durante su intervención, Gavira analizó exhaustivamente el desempeño de Moreno en diversas áreas clave, como la creación de empleo, la atención a la salud, la situación de la vivienda, los escándalos de corrupción y la actual crisis de confianza política. "Esta es la Andalucía que ese equipo le está dejando a las futuras generaciones", advirtió con preocupación.

Con esos aspectos en mente, el portavoz de Vox desglosó las fallas en la administración de Moreno, subrayando que "los problemas laborales persisten", con un empleo marcado por la precariedad y bajos salarios. Asimismo, resaltó las deficiencias en el sistema de salud, señalando que "la falta de confianza en su gestión se hace evidente". En cuanto a vivienda, lamentó que el gobierno no esté utilizándose adecuadamente los presupustos asignados y solo busque "hacer caja".

Gavira continuó su crítica señalando que la noción de que la corrupción ha sido erradicada en la Junta se está desvaneciendo, en especial tras los escándalos en la Diputación de Almería relacionados con el caso de las mascarillas.

En el debatido tema de la inmigración, Gavira expresó su inquietud por lo que considera un fomento de situaciones ilegales que genera "inseguridad en la vía pública" y que podría manipular el censo electoral a través de nacionalizaciones cuestionables. Preguntándose "qué haremos con aquellos inmigrantes que no aportan nada", no dudó en advertir a Moreno que "no puede seguir burlándose de los ciudadanos españoles".

Finalmente, el portavoz de Vox aprovechó para poner en entredicho el compromiso del presidente con respecto a un pacto similar al firmado por el PP en la Generalitat Valenciana. Gavira se mostró escéptico sobre si Moreno seguiría el mismo camino, insinuando que "aceptará esos términos", aunque también acusó a la formación de oponerse a la inmigración ilegal solo cuando hay cámaras presentes.