El Gobierno de la Nación se ha enfrentado a críticas por parte de José Antonio Nieto, consejero de Justicia, Administración Local y Función Pública, debido al anuncio de huelga indefinida por parte de jueces y fiscales a partir del 16 de mayo. En una visita a los juzgados de La Palma del Condado (Huelva), Nieto ha reprochado al Gobierno que su gestión está siendo incapaz de escuchar a las necesidades de los profesionales del sector y que todo lo que no sea demagogia se le escapa de las manos.

Nieto va más allá y señala que la decisión de los trabajadores de la justicia era previsible debido a la mala gestión gubernamental en un tema tan importante como este y que la huelga es una postura firme por parte de estos trabajadores desesperados por no sentirse escuchados. "Me preocupa mucho qué necesitan los ciudadanos, los justiciables", ha declarado Nieto.

Este es el segundo paro al que se enfrentan los profesionales de la justicia después de la huelga de los letrados de la Administración de Justicia. Según Nieto, el objetivo del Gobierno andaluz es proteger a los letrados y a los funcionarios, pero sobre todo a los ciudadanos que se verán afectados por el posible caos en la justicia.

Por su parte, tres asociaciones de jueces y dos de fiscales han anunciado su intención de convocar una huelga indefinida a partir del 16 de mayo. La convocatoria se debe a la falta de propuestas concretas y un verdadero propósito de negociar por parte de los ministerios de Justicia y Hacienda para mejorar los salarios y reducir la carga de trabajo.

Según el comunicado de la Asociación Profesional de la Magistratura, la Asociación Judicial Francisco de Vitoria, Foro Judicial Independiente, la Asociación de Fiscales y la Asociación Profesional e Independiente de Fiscales, el sistema judicial se encuentra en un estancamiento actual y necesitan mejoras para superarlo. Juezas y Jueces para la Democracia y la Unión Progresista de Fiscales también apoyan la necesidad de mejoras para el sistema judicial, pero esperarán a la reunión de la Mesa de Retribuciones programada para el 3 de mayo antes de tomar una decisión final sobre la huelga.