La Comisión Europea ha advertido este jueves sobre los efectos adversos que puede tener la ampliación de los regadíos en el humedal de Doñana, impulsada por la Junta de Andalucía, y ha recordado que se debe cumplir la sentencia del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) para garantizar su protección. Si no se cumple, podrían imponerse multas.

El portavoz de la Comisión, Tim McPhie, ha asegurado que están en diálogo con las autoridades españolas y que, si es necesario, se adoptarán nuevas medidas para garantizar el cumplimiento de la sentencia del TJUE, incluyendo posibles sanciones monetarias.

La toma en consideración de la proposición de ley para aumentar los regadíos en el humedal fue aprobada por el Parlamento andaluz este miércoles con los votos a favor del Partido Popular y Vox. Pero los servicios comunitarios ya habían alertado el pasado 21 de marzo, a través de una carta, que la ley promovida por la Junta de Andalucía para regularizar los regadíos violaba la primera sentencia condenatoria.

La legislación medioambiental de la UE exige el uso sostenible de los recursos naturales, incluyendo el agua, y que las actividades económicas sean compatibles con la conservación de los espacios de la red Natura 2000. Según McPhie, la sobreexplotación de las aguas subterráneas en el ecosistema de Doñana ha sido probada científica y técnicamente y es la base por la que el Tribunal de Justicia de la UE declaró en junio de 2021 que España había incumplido la obligación de aplicar la normativa europea del agua y que no estaba evitando el deterioro de los hábitats protegidos en varios espacios Natura 2000 de Doñana.

En julio de 2022, la Comisión envió una carta a España en la que le instaba a aplicar todas las medidas necesarias para cumplir la sentencia del TJUE, seguida de una nueva carta en marzo de este año a modo de ultimátum. Actualmente, la Comisión está examinando las observaciones presentadas por España en respuesta a dicha carta de emplazamiento.