El juicio contra el exdirector de la Fundación Andaluza Fondo de Formación y Empleo (Faffe), Fernando Villén y la ex directora económica financiera de la entidad, Ana Valls, ha comenzado en la Audiencia de Sevilla. Los acusados enfrentan cargos por los pagos realizados en clubes de alterne con tarjetas bancarias de la entidad pública, lo que constituye un caso de corrupción. Durante la sesión inaugural, el fiscal Fernando Soto, ha revelado que Villén gastó 32.566 euros, al menos en diez visitas, en locales de prostitución usando las tarjetas de la entidad.
El uso de "dinero del público en prostitutas, orgías y festivales" resulta "moralmente reprobable". Según el fiscal, Villén en "complicidad" con Ana Valls crearon fórmulas para "ocultar" el dinero gastado en los clubes y evitar el seguimiento de estos gastos con cargo a la Faffe. Los dos acusados "inventaron gastos, facturas y anticipos" que se utilizaron para "compensar" el dinero empleado por Villén. Se solicitan seis años de cárcel para Fernando Villén y cuatro para Ana Valls, por un presunto delito continuado de malversación de caudales públicos, en concurso con un delito continuado de falsedad en documento oficial cometido por funcionario público.
La defensa de Fernando Villén acepta que los hechos señalan un comportamiento "moralmente reprobable". Sin embargo, niegan que exista un fraude en la Administración pública y aseguran que "el dinero fue devuelto" a la Faffe. Villén devolvió "en todas las ocasiones" el dinero gastado en los prostíbulos, lo que según ellos constituye el eje del caso.
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