SEVILLA, 25 de noviembre. Lamentablemente, este lunes nos ha dejado Félix Manuel Pérez Miyares, un destacado político originario de Nerva, Huelva, nacido en 1936. Pérez Miyares ocupó el cargo de ministro de Trabajo durante el último mandato del gobierno de Adolfo Suárez, desde septiembre de 1980 hasta febrero de 1981. Su contribución a la política andaluza es recordada no solo por su papel en el gobierno central, sino también por su labor como consejero de Agricultura y Pesca en la Junta de Andalucía, en una época preautonómica crucial para la región, según ha confirmado Europa Press.

El legado de Pérez Miyares se extiende a múltiples responsabilidades en la administración pública. Fue designado como el primer Delegado General del Gobierno en Andalucía entre febrero y septiembre de 1982, un cargo que asumió por recomendación del presidente Leopoldo Calvo Sotelo, marcando un hito en la representación del gobierno en la comunidad autónoma.

En el ámbito regional, su influencia fue notable. Se desempeñó como presidente de la Autoridad Portuaria de Sevilla entre 1996 y 1998. Su compromiso con el medio ambiente fue evidente en su última misión institucional, donde coordinó proyectos de recuperación ecológica en el Guadiamar desde 1998 hasta 2004, reflejando su preocupación por el bienestar de la naturaleza y la sostenibilidad.

Pérez Miyares también tuvo una carrera como diputado en el Congreso, representando a la Unión de Centro Democrático (UCD) en las legislaturas de 1977 y 1979, así como al Partido Demócrata Popular (PDP) en una coalición que incluyó a AP-PDP-UL por la circunscripción de Jaén. Su papel en estas formaciones políticas fue esencial para la articulación del centro político en un momento de grandes transformaciones en España.

Desde 1977 hasta 1982, fue presidente regional del UCD en Andalucía, tras haber ejercido anteriormente como vicepresidente regional de este partido bajo la presidencia de Manuel Clavero, lo que demuestra su liderazgo y reconocimiento dentro de esta agrupación política.

No solo se limitó a su carrera política; también destacó como abogado y profesor universitario. Pérez Miyares estudió Derecho en la Universidad de Sevilla, donde comenzó a desarrollar su interés por el Derecho del Trabajo y las relaciones laborales. En 1965 se convirtió en abogado sindical y, de 1970 a 1976, fue delegado provincial de la Organización Sindical en provincias como Jaén, Cádiz y Guipúzcoa, un papel que refleja su dedicación a los derechos de los trabajadores y su compromiso con la justicia social.