En Sevilla, la familia del soldado Carlos León Rico, fallecido en diciembre, ha enviado una carta a la ministra de Defensa, Margarita Robles, exigiendo claridad sobre la situación del capitán investigado en el caso de las maniobras en Cerro Muriano.

La semana pasada, el capitán Zúñiga, el teniente Tato y el sargento Estupiñán comparecieron como investigados ante el Juzgado Togado Militar número 21 de Sevilla, lo que llevó al abogado de la familia a enviar una carta a la ministra pidiendo información al respecto.

En la misiva, se solicita aclarar si el capitán y el teniente continúan al mando de tropas después del trágico accidente en el que perdieron la vida dos soldados, y se cuestiona si las medidas de seguridad en el ejercicio eran adecuadas.

El abogado plantea si el capitán, a pesar de haber sido apartado del mando públicamente, sigue teniendo autoridad sobre militares en ejercicios y si ha sido sancionado anteriormente por algún motivo disciplinario.

Según testimonios, el capitán ordenó a la tropa atravesar un lago sin las medidas de seguridad necesarias, lo que resultó en la muerte de los dos soldados, y se destaca la falta de socorristas y equipo médico en el lugar.

La familia del soldado fallecido señala que el coronel aprobó la maniobra sin estar incluida en el Plan de Instrucción Básico, lo que evidencia un fallo en la supervisión y regulación de la actividad.

En un contexto donde el capitán y otros mandos responsables no garantizaron la seguridad de los soldados, la familia exige responsabilidades y esclarecimiento sobre lo sucedido en las maniobras en Cerro Muriano.