La alcaldesa de Torremolinos, Margarita del Cid, ha reafirmado el compromiso de la ciudad con el respeto y la diversidad, subrayando que estos valores son fundamentales para la identidad de la comunidad. Esta declaración surge en respuesta a la reciente controversia en torno a un club privado que ha hecho público un reglamento excluyente y discriminatorio.
Recientemente, un club de lujo de inspiración marroquí en Torremolinos generó indignación al anunciar que no se permitiría la entrada a personas que se autodenominan "maricones". Frente a este hecho, el Ayuntamiento de la localidad ha tomado una postura firme, asegurando que no tolerará este tipo de actitudes y que emprenderá acciones legales para abordar la situación.
El club, cuya apertura está programada para el 18 de este mes, ha sido objeto de críticas por su reglamento, que en redes sociales detalla una serie de prohibiciones que incluyen “no peleas, drogas, gorras, chanclas y maricones”. La administración del local aclara que se reserva el derecho de admisión, una frase que ha sido interpretada como un escudo para encubrir actitudes discriminatorias.
Al tener conocimiento de esta polémica, la alcaldesa ha expresado su "sorpresa" y ha calificado el comportamiento del club no solo de "desagradable", sino de potencialmente delictivo, destacando que procederá legalmente en consecuencia. Del Cid enfatizó la trascendencia de la diversidad y el respeto como pilares de la convivencia en la ciudad y señaló que estos principios no se pueden negociar.
El Ayuntamiento no se quedará de brazos cruzados. Desde el pasado jueves, las autoridades municipales han comenzado a coordinarse con los colectivos LGTBI de la localidad para frenar esta situación. La alcaldesa ha manifestado que están decididos a actuar judicialmente contra los promotores del evento y el establecimiento, reafirmando que están trabajando activamente para evitar que se materialice.
"El respeto y la diversidad son valores fundamentales que nos definen como comunidad", explicó Del Cid, destacando la importancia de proteger la dignidad de todos los ciudadanos por encima de todo. La alcaldesa ha sido clara al reiterar que cualquier forma de homofobia será confrontada decididamente, ya que su administración busca asegurar un entorno donde todos se sientan bienvenidos y respetados.
"Las actitudes de odio y homofobia no son bienvenidas aquí", enfatizó, comprometida a erigir barreras contra cualquier expresión que promueva la discriminación. En un tono firme, declaró: "Los únicos que sobran son ellos", refiriéndose a los promotores del club, dejando claro que Torremolinos no permitirá que tales eventos socaven el espíritu inclusivo que ha caracterizado al municipio malagueño durante décadas.
Torremolinos ha sido históricamente un refugio para quienes valoran la libertad de expresión y la diversidad en sus múltiples formas. La respuesta de la alcaldesa y del Ayuntamiento marca un hito en la lucha por la inclusión, confirmando que la ciudad se mantendrá firme frente a cualquier amenaza a sus valores fundamentales.
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