24h Andalucía.

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Desarticulada red de contrabando de tabaco en Jaén: 16 detenidos y 25.000 kilos intervenidos.

Desarticulada red de contrabando de tabaco en Jaén: 16 detenidos y 25.000 kilos intervenidos.

La Policía Nacional, en colaboración con Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria, ha llevado a cabo una operación contra el contrabando de tabaco. Como resultado, se han detenido a 16 personas y se han intervenido 25.000 kilos de tabaco, que en el mercado negro podría haber alcanzado un valor de 750.000 euros una vez elaborado en picadura.

La organización criminal desviaba la mercancía de su destino declarado y la llevaba a una nave en Bailén (Jaén). Desde allí se distribuía a diversas fábricas en tres provincias andaluzas. Una vez allí, se elaboraba en forma de picadura, se empaquetaba y se distribuía.

Los detenidos, que tienen entre 20 y 55 años, son hombres con antecedentes por hechos similares. Se les ha imputado por delitos de contrabando y pertenencia a organización criminal. La investigación comenzó en febrero y fue llevada a cabo por el Grupo de Estupefacientes de la Comisaría Local de Linares (Jaén), la Brigada de Policía Judicial de Jaén y la Unidad Operativa de Vigilancia Aduanera de Córdoba perteneciente a la Agencia Tributaria.

La organización importaba grandes cantidades de hoja de tabaco para elaborarlo en forma de picadura con el único fin de enriquecerse económicamente mediante la comisión de delitos de contrabando. Los miembros de la organización adoptaban medidas de seguridad para dificultar la investigación policial y utilizaron fábricas repartidas en otras provincias para desvincularlas del centro de Bailén.

La hoja de tabaco se introducía en España de forma legal y se desviaba de su destino declarado utilizando camiones que la transportaban hasta una nave industrial en Baleín. La mercancía se camuflaba como mercancía destinada al abono con un nuevo etiquetado de las cajas. Luego, se transportaba a distintas fábricas en Córdoba, Málaga y Sevilla, donde se procesaba para convertirla en picadura.

La picadura de tabaco se empaquetaba en bolsas termoselladas y se distribuía a un precio de 30 euros el kilogramo directamente al consumidor. La organización utilizaba inhibidores de frecuencia para no ser detectados y vehículos lanzadera para alertar de los controles policiales y efectuar labores de contravigilancia.

En total, se ubicaron siete fábricas o puntos de tratamiento en diferentes provincias, se intervinieron más de 2.500 kilos de picadura de tabaco, 24.700 kilos de hoja de tabaco lista para transformarse, diez máquinas picadoras de tabaco, seis máquinas selladoras, seis básculas de precisión, dos máquinas envasadoras plásticas y tres inhibidores de frecuencia.

El Cuerpo Nacional de Policía destaca que el contrabando de tabaco para su venta en el mercado ilícito se ha convertido en un negocio muy rentable que genera grandes pérdidas millonarias en la recaudación de impuestos. Además, afecta al gremio de estanqueros y es considerado un tipo de delito que no genera gran alarma social.