ALMERÍA, 30 de agosto. - La Audiencia Provincial de Almería ha hecho justicia al condenar a un individuo a tres años y medio de prisión tras agredir brutalmente a su pareja, con quien apenas llevaba dos meses de relación. Este violento episodio se desató cuando el acusado observó a su pareja conversando con otro hombre en un bar de Aguadulce, lo que desencadenó un ataque que terminó en una playa, donde incluso intentó cometer una agresión sexual.

En la resolución judicial, el tribunal impuso una pena de tres años de cárcel por un intento de agresión sexual y seis meses adicionales por lesiones derivadas de la violencia de género, ya que la víctima tardó un mes en recuperarse de las lesiones físicas sufridas. Esta sentencia, que ya es firme, también contempla otras sanciones como 80 días de trabajo comunitario por amenazas y 18 días de localización permanente debido a los actos de vejación sufridos por la mujer.

El tribunal reveló que el acusado admitió haber agredido a la víctima alrededor de las 5:30 de la mañana del 19 de noviembre de 2023, en una zona conocida por sus bares. Al notar que su pareja hablaba con un hombre, la atacó por la espalda, tirándole del pelo con fuerza, lo que marcó el comienzo de una serie de agresiones sin mediar una sola palabra.

Tras empujarla a la calle para "hablar", le propinó un puñetazo que la hizo caer al suelo, tras lo cual continuó su ataque con más golpes y patadas, dirigidos especialmente a su abdomen. Durante esta brutal confrontación, también la insultó y amenazó de muerte, reflejando la gravedad de la situación de violencia extrema a la que era sometida.

Cuando la víctima intentó comunicarse con su familia, el agresor la inmovilizó en el suelo y, de manera manipuladora, realizó una videollamada a la madre de la joven, pidiéndole que acudiese a recogerla. Aprovechando un momento de distracción, la víctima logró levantarse y tratar de escapar, pero su pareja la persiguió, obligándola a regresar a la playa para que se lavara la cara y no fuera vista en un estado tan impactante por sus seres queridos.

Al regresar del mar, el acusado, de manera coercitiva y sin su consentimiento, comenzó a besarl y desnudarse, intentando forzar a la mujer a participar en prácticas sexuales que ella rechazó decididamente. Afortunadamente, la situación se vio interrumpida por la llegada de la hermana de la víctima, quien le permitió escapar de una situación que pudo haber tenido consecuencias aún más graves.

Las secuelas de este horrendo ataque llevaron a la víctima a requerir asistencia médica por las múltiples lesiones que sufrió, las cuales tardaron en sanar 31 días, además de dejarle una cicatriz permanente. Antes del juicio, el agresor pagó 5.000 euros como compensación inicial, aunque aún debe indemnizar a la mujer con 21.000 euros por los daños físicos y emocionales sufridos a raíz de sus acciones.

Para aquellas víctimas que necesiten apoyo, el teléfono 016 está disponible como recurso de información y asesoría legal en casos de violencia machista. Esta línea gratuita opera las 24 horas, atiende en múltiples idiomas y no deja rastro en las facturas telefónicas, aunque se recomienda eliminar el historial en los dispositivos móviles. Asimismo, se puede contactar a través del correo [email protected] o mediante WhatsApp al 600000016.