SEVILLA, 22 de agosto. La Diputación Permanente del Parlamento andaluz ha tomado la decisión, respaldada por la mayoría del Partido Popular Andaluz (PP-A), de no convocar un pleno extraordinario en agosto, a pesar de las solicitudes de los grupos de la oposición. Esta petición buscaba que el gobierno de Juanma Moreno compareciera ante el Parlamento para abordar cuestiones críticas como los devastadores incendios forestales que han afectado a la región este verano, así como el incendio ocurrido el pasado 8 de agosto en la emblemática Mezquita-Catedral de Córdoba.

Este órgano, encargado de mantener el funcionamiento de la cámara durante las pausas estacionales, desestimó las propuestas de los grupos Socialista, Por Andalucía y Mixto-Adelante Andalucía. Estas organizaciones solicitaban la presencia de varios consejeros clave, incluyendo al de la Presidencia y al de Sostenibilidad, para discutir la gestión y respuesta del gobierno ante los recientes desastres naturales, en particular los ocurridos en Tarifa.

Además, las peticiones de la oposición para que la consejera de Cultura y Deportes, Patricia del Pozo, compareciera también fueron desechadas por la Diputación Permanente, siempre con el apoyo del PP-A. Este rechazo ha generado preocupación sobre la falta de transparencia y rendición de cuentas en la gestión de crisis ambiental y cultural en la comunidad.

Durante el debate sobre estas solicitudes, Pablo Venzal, portavoz adjunto del Grupo Popular, argumentó que no se percibía una "necesidad que justifique" la celebración del pleno extraordinario exigido por los grupos opositores. Esta postura ha sido criticada por la oposición, que considera crucial el diálogo en temas de tanta relevancia social y política.

En respuesta a la negativa, la portavoz del Grupo Socialista, María Márquez, anunció que su partido planteará la creación de una comisión de investigación en el Parlamento. Esta iniciativa tiene como objetivo analizar de manera profunda y exhaustiva cómo se están utilizando los fondos destinados a la prevención de incendios en Andalucía, resaltando así la urgencia de una mayor supervisión en la gestión de recursos para enfrentar estos desafíos ambientales.