SEVILLA, 20 de noviembre.

La Asociación Cultural El Anaquel del Pinsapo, ubicada en el vecino y vital barrio de Los Remedios en Sevilla, ha emitido una alarmante denuncia tras el robo de una de sus furgonetas, la cual estaba destinada a transportar ayuda humanitaria a los afectados por la reciente DANA en Valencia. Este incidente se traduce en la frustrante imposibilidad de enviar “40 camas y 40 colchones que ahora no podrán llegar a quienes más los necesitan”.

En declaraciones a Europa Press, Luis Manuel Guerra Bernal, presidente de la asociación, ha proporcionado detalles sobre el robo, indicando que el vehículo se encontraba estacionado en la explanada del recinto ferial y que el incidente tuvo lugar en la noche del sábado. Guerra ha destacado que ya han interpuesto una denuncia formal ante la Policía Nacional y también han informado a las autoridades de la Policía Local, buscando así la colaboración necesaria para recuperar el vehículo.

El presidente de El Anaquel expresó su profundo pesar por la furgoneta robada, que además estaba equipada con “pañales para adultos listos para ser distribuidos”. Esta furgoneta iba a ser cedida a un grupo de voluntarios del Colegio Santa Ana para facilitar la entrega de asistencia a Valencia, con un viaje programado para este miércoles hacia la Comunidad Valenciana.

Luis Manuel Guerra es un ferviente defensor de la misión que lleva a cabo la asociación en algunas de las áreas más vulnerables de la ciudad. “Todo es posible gracias a las generosas donaciones de innumerables personas y empresas”, comenta, al tiempo que menciona su colaboración con la comunidad de Tres Barrios-Amate. Guerra enfatiza la crítica necesidad de la furgoneta, que les permite recoger y distribuir alimentos y otros bienes esenciales a familias en Los Pajaritos y Candelaria, entre otras zonas desfavorecidas, subrayando la gravedad de la situación actual.

Por otro lado, la asociación ha lanzado un urgente llamado a la ciudadanía en un esfuerzo por localizar la furgoneta robada. Describen el vehículo como una Fiat Ducato blanca, “larga y alta”, con la matrícula 1050 JBD, prestada por Automóviles Berrocar, y que carece de cristales en la parte trasera de carga. También aclaran que, a pesar de que tiene un diseño pintado, todavía se pueden distinguir las marcas del nombre Berrocar en sus laterales. La comunidad se une en la esperanza de poder recuperarla y continuar con su labor solidaria.