SEVILLA, 7 de octubre. En un pronunciamiento desde la capital andaluza, Antonio Sanz, consejero de la Presidencia, Interior, Diálogo Social y Simplificación Administrativa, hizo énfasis en la responsabilidad que debe tener el Gobierno ante los recientes problemas en el programa de detección de cáncer de mama. Sanz lamentó que algunos partidos de la oposición busquen capitalizar políticamente el desliz, mientras el Ejecutivo se esfuerza por implementar soluciones efectivas.

Durante su comparecencia ante los medios, el consejero subrayó que lo prioritario es garantizar una respuesta ágil y efectiva, así como aprender de los errores para evitar su repetición. “No hay excusas posibles cuando se trata de la salud de las personas”, afirmó, haciendo un llamado a la unidad ante la crisis.

El consejero se solidarizó con los afectados y ofreció disculpas por las fallas en el sistema. “Estamos comprometidos a buscar soluciones y asegurar que esto no vuelva a suceder", agregó, destacando el interés del Gobierno por cumplir con sus responsabilidades sanitarias.

Sanz insistió en que la función de la Junta debe centrarse en encontrar respuestas a los problemas, en lugar de sumergirse en confrontaciones políticas. “La prioridad es la salud y bienestar de los ciudadanos que se vieron perjudicados por este episodio”, remarcó, enfatizando el deber de actuar con eficacia.

A su vez, destacó la postura de la Junta al reconocer públicamente los errores y asumir responsabilidades, prometiendo un enfoque de humildad en la gestión de la crisis. “Estamos trabajando arduamente para ofrecer soluciones inmediatas para que estos errores no se repitan”, aseguró.

El consejero también enfatizó que el Gobierno está comprometido a ofrecer seguridad y confianza a las personas afectadas, y anticipó que en los días siguientes presentarán un informe detallado sobre la evaluación de la situación y las medidas a implementarse. “Estamos en pleno proceso de acción y respuesta”, concluyó Sanz, manifestando su deseo de que las diferencias políticas no interfieran en la atención a la salud pública.

“La lucha política por el poder no debe tener cabida cuando hay vidas en juego”, reflexionó, dirigiéndose a quienes intentan aprovechar la situación para atacar al Gobierno. “Cada uno tiene su lugar en este debate, pero el verdadero desafío es encontrar soluciones para los ciudadanos”, finalizó, reafirmando el compromiso del Gobierno andaluz de seguir adelante en el camino hacia la recuperación de la confianza de los afectados.